Todos conocemos de sobra los cinco sentidos: el tacto, el olfato, el gusto, el oído y posiblemente uno de los más valorados, el sentido de la vista.
El órgano encargado que posibilita este último, son nuestros ojos. Gracias a ellos podemos percibir la forma, tamaño, distancia y color de los objetos. En visión binocular, alcanzamos una visión de unos 150º.
Nuestros ojos recogen la luz del exterior que nos rodea, atraviesa los medios refringentes del globo ocular (cornea, cristalino, humores acuoso y vítreo), hasta llegar a la retina. Una vez allí, la luz se convierte en impulsos nerviosos, abandonan nuestro ojo a través del nervio óptico, llegando hasta la parte occipital de nuestro cerebro, el cual se encarga de interpretar las imágenes percibidas
Es un proceso complejo, preciso y natural. Un muestra más de lo inteligente y maravilloso que es el cuerpo humano.
El hecho tan simple de abrir los ojos y mirar, se debe a millones de años de evolución, incluso con un defecto refractivo, es un milagro de la naturaleza.
Cuidemos nuestra Vista. Nuestros ojos son únicos e irrepetibles. Mimémoslos.